Una de las cosas que admiro de la mayoría de los países del primer mundo es su FIAT del desarrollo. Sí, esta palabra es la palabra más poderosa cuando se trata de tomar decisiones y promover el crecimiento, con el fin de evolucionar y crecer como país y civilización.
Durante mi juventud crecí en un país donde la mayoría de las veces escuché la palabra de dos letras: ¡NO! No para el crecimiento; No para proyectos importantes; No a la reparación de los agujeros en las calles, por lo que la vida siguió su camino con calles llenas de huecos. No a mi tema de tesis sobre un tema neuropsicológico, debido a que era una idea rara. ¡No no no!
Bueno, he estado en los EE.UU. casi cuatro décadas, y estoy agradecido de haber vivido y trabajado con personas que no tienen miedo a asumir riesgos y responsabilidad, que no tienen miedo de trabajar duro y tener una fuerte visión del futuro. Cuando las personas se preocupan por sus comunidades, hacen lo que se necesita para que estas sean fuertes y donde predomine la abundancia.
Colombia acaba de tener una manifestación nacional, ya que se sienten frustrados con un presidente que promete la paz, y que esta no llega. Es difícil vivir en un país donde los líderes pareciera que no se preocuparan por su gente. Tal vez, podríamos decir que la corrupción es la más alta forma de egoísmo.
En lugares como Chocó, existe la necesidad de dar prioridad a la salud, la nutrición, la educación, el empleo, la infraestructura, la electricidad, el agua limpia. Hay una necesidad de decir sí, para satisfacer las necesidades de la gente de Chocó, una región llena de oro, donde abunda la pobreza.
Por lo tanto, rogamos a Dios que los líderes de los países en desarrollo, abran sus ojos, para proporcionar oportunidades y tomar decisiones donde SI sea la palabra que puede cambiar su mundo. ¡SÍ!
The FIAT of Development
One of the things that I admire most of the countries of the
first world is their FIAT to grow. YES,
this three-letter word is the most powerful word when it comes to making
decisions and promoting growth, in order to evolve as a country and civilization.
During my youth I grew up in a country where mostly I heard
the two-letter word: NO! No to growth; No to important projects; No to
fixing the holes on the streets, so life kept going with streets full of
holes. No to my thesis theme on a
neuropsychological topic, because that was a rare idea. No, no, no!
Well, I have been in the US almost four decades, and I am
thankful to have lived and worked with people who are not afraid to take risks
and responsibility, who are not afraid to work hard, and to have a strong
vision of the future. When people care
about their communities, they do what it takes to make them strong and plentiful.
Colombia just had a national demonstration because the people are
frustrated with a President who promises peace, and doesn’t deliver. It is hard to live in a country where the
leaders do not seem to care about their people.
Perhaps, we could say that corruption is the highest form of
selfishness.
In places like Choco, there is a need to prioritize health,
nutrition, education, employment, infrastructure, electricity, clean
water. There is a need to say YES, to
meet the needs of the people of Choco, a region full of gold, where poverty
abounds.
So, we pray that leaders in the developing countries of the
world, open their eyes, to provide opportunities and make decisions since YES
is that three letter word that can change their world. YES!